
QUIERO DEDICAR ESTA "PSEUDO-POESÍA"
A MI ROSA DE PRIMAVERA, A FAYNA Y A SIRY...
SÉ QUE ES DIFÍCIL LO QUE OS PIDO, PERO, POR FAVOR...
Sé que en estos últimos tiempos
estáis necesitando de una luz especial
que pueda difuminar esos nubarrones negros
que opacan vuestras vidas
y que sea capaz de volverlas
a iluminar...
Por eso,
he decidido enviaros a mi Ángel preferido,
Angelet, para que se encargue de
llenar de magia otra vez
todos y cada uno de
vuestros días.
Lo único que tenéis que hacer
es elevar vuestra alma al cielo
y él os hará sentir su
cálida presencia…
Entregadle vuestras lágrimas,
y él las transformará en hermosas perlas…
Regaladle vuestros silencios,
y él hará de ellos lindas melodías
que entonará en el cielo
y que podréis oír desde
la Tierra...
Mi ángel os hará un regalo…
Será un dulce beso que lloverá del cielo
y que sentiréis como una tierna caricia
en vuestro rostro de mi
mano amiga…
Y en sus bellas alas de tul y seda,
yo os envío este dulce beso,
para daros mi alegría, mi comprensión
y una cálida compañía.
Nunca estaréis solas,
porque yo siempre estaré con vosotras…
En vuestros momentos de felicidad,
reiremos todas juntas,
y en vuestros días de desolación,
os daré abrigo a
todas...
Porque los verdaderos amigos
son ángeles que nos elevan en sus alas
cuando no podemos volar y
desistimos del vuelo…
Son ángeles que nos besan el alma
con sus palabras de terciopelo
y seda…
Son ángeles que nos toman la mano
para brindarnos consuelo,
y que nos abrazan,
si es necesario...
Sentid sus alas como os abrazan dulcemente
para secar vuestras lágrimas y daros todo su amor,
para escuchar vuestras palabras e iluminar vuestros días,
para brindaros confianza y sembrar sosiego
en vuestro andar.
Y si por casualidad necesitarais otro beso,
solo tendríais que elevar vuestra alma,
montaros en sus alas de seda y tul
y prepararos para volar…
Recordad que esta mala racha
es solo un momento en la eternidad
en el que vuestras alas se han cerrado
por alguna tristeza que yace en
vuestro corazón…
Pero estoy completamente segura
de que mi Angelet,
con la dulzura de sus beso,
hará el milagro de pintar vuestras tristezas
con los colores
del amor.
Descansad en la serenidad de espíritu
que os brinda la presencia de mi Ángel,
y disfrutad de vuestro
vuelo…
Sólo tenéis que creer en vosotras,
y comenzar a volar entre los cientos de besos
que van lloviendo desde el cielo,
que son mis brazos mis fuerzas,
mi ternura y, sobre todo,
mi amistad...
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